miércoles, 9 de octubre de 2013
MONCHITA.
Tarde de ajetreos varios.
Me devuelven Off-side, libro de mi admirado Torrente Ballester. Antes de ponerlo en el anaquel, lectura al azar.
"... Landrove escribe a máquina sus listas interminables, y el cabello se le cae encima de la frente. Entonces se abre una puerta y aparece en ella Ramona, ahora Monchita, sólo Monchita, para siempre Monchita, con un camisón corto color salmón cuyo borde apenas tapa el lado superior del triángulo oscuro; medias negras, ligas floreteadas y zapatos de tacón alto. Monchita apoya el cuerpo en el quicio alumbrado, saca la cadera poderosa y deja caer sobre una pierna el peso del cuerpo, mientras la otra pierna se menea con clara intención lasciva. Landrove cierra los ojos, se los tapa con las manos, e intenta recordar la fecha en que fue vendido el retablo gótico florido de San Crispín de los Ajos. Pero la voz de Monchita susurra como el viento de abril en el silencio demasiado intelectualizado del estudio : " ¿ No vienes, amor mío ? ¡ Mira que el bien de Dios se está acabando ! " Landrove aduce cansancio, urgencia de trabajo, falta de preparación psicológica, indiferencia; pero Monchita lo coge por la solapa y lo arrastra al lecho, mientras afirma con voz tajante que exigirá el débito conyugal hasta la última gota... "
Gonzalo Torrente Ballester ( 1910-1999 )
( Foto de Günther Blum )
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