Aparece don Álvaro Cunqueiro.
" Desde Santo Domingo se oye al Miño cantar su pausado y grave gregoriano, y uno se imagina que como en la historia de lord Dunsany, los espíritus de las aguas pueden venir silenciosos hasta la iglesia o sumergirse en la pila de agua bendita y así librarse de pecado. Dejamos Santo Domingo, por la calle del santo y la plazuela del Arco, y luego subiendo unas escaleras, hacia la catedral y los franciscanos, dimos con la lamprea que nos estaba esperando. No era una lamprea : era " la lamprea", física y metafísicamente hablando : era el Miño submarino, negro y untuoso, cocinado en la chata tartera de barro. La lamprea es el pozo que dejan las aguas del Miño al cabo de un recorrido de 340 kilómetros "
Álvaro Cunqueiro ( 1911-1981 )
( Foto de Adam Katseff )