Sueños extraños, imágenes desconocidas de lugares acogedores. Morfeo no enseña todas sus cartas.
Estupendo aceite de oliva de San Sebastián de los Ballesteros, desayuno lento.
" … Vino la noche, con una estrella muy grande, y el niño no quería entrar a cenar." Entra, niño, que llega el frío". dijo la madre. Pero, en lugar de entrar, el niño se levanto del quicio y se fue en busca del amigo, con las canicas, el camión, la pistola de hojalata y el reloj que no andaba. Al llegar a la cerca, la voz del amigo no le llamó, ni le oyó en el árbol, ni en el pozo. Pasó buscándole toda la noche. Y fue una larga noche casi blanca, que le llenó de polvo el traje y los zapatos. Cuando llegó el sol, el niño, que tenía sueño y sed, estiró los brazos, y pensó. " Qué tontos y pequeños son estos juguetes. Y este reloj que no sirve para nada". Lo tiró todo al pozo y volvió a la casa, con mucha hambre. La madre le abrió la puerta, y le dijo : " Cuánto ha crecido el niño, Dios mío, cuánto ha crecido". Y le compró un traje de hombre, porque el que llevaba le venía muy corto "
Ana María Matute ( 1925-2014 )
( Foto de Peter Lindbergh )
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