" Cómprate lo que haga falta. Un día es un día, y no debemos presentarnos de una manera ridícula.
- Sí- decía Laura, todavía sorprendida- yo procuraré que todo quede bien, gastando lo menos posible; ya ves, el sombrero me lo pueden dejar mis primas. Hace pocos días compraron uno precioso, muy de moda, aunque algo atrevido; imagínate que lleva una pluma encarnada, pero una pluma grande como aquella que había en el despacho del abuelo. ¡ Qué suerte que ellas me lo pueden dejar " Porque, ya ves, los míos están anticuados; ya no se llevan. ¿ Y el traje ? Espera, se me ocurre una idea; iré mañana a la modista. Trataremos de arreglar uno que tengo, y, si no, aunque gastara un poquito más, algo que hiciera juego con el sombrero.
- Bueno, mujer, esto tú lo sabes mejor que yo. Pero ¿ estás contenta verdad ?
- Mucho, mucho, Carlos. Me vuelvo loca pensándolo.
Aquella noche Laura no podía dormir… "
Felicidad Blanc ( 1914-1990 )
( Foto de Leon Herschtritt )
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