Duermevela con Bach. Entra un hilo de luz por los postigos, muy cerca veo una escribanía heredada. Hay objetos que con mirarlos, cuentan una historia.
" A mí, una mujer femenina sentada en el autobús, o en una terraza, o hasta en la consulta del médico, con las piernas cruzadas, de manera que la falda le quede un poco por encima de las rodillas, hasta la mitad del muslo, nunca más, puede hacerme fulminantemente feliz "
" Quedan todavía muchas cosas para las que no tenemos respuesta, afortunadamente "
" En el amor físico los cuerpos pueden y deben llegar a sorprenderse de su osadía "
" La frialdad de la mujer es a veces esa puerta cerrada tras la cual hay un incendio "
Karmelo C. Iribarren.
( Foto de Sergio Coppi )
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