miércoles, 29 de abril de 2009

JUEGOS PARA APLAZAR LA MUERTE.


Maravillosa tarde de lectura con " Relatos de Kolimá " del escritor ruso Varlam Shalámov; después del gimnasio lo necesitaba. Coincido con Juan Bonilla cuando contesta a la pregunta de ¿para qué sirve la literatura?

" ...Me he planteado esa cuestión infinidad de veces, pero nunca he perdido el tiempo intentando una declaración convicente y firme. Lo único que sé es que cuando murió mi padre recordé unos versos de Thomas Stearn Eliot que si bien no paliaron mi dolor sí al menos me lo llegaron a explicar; cuando alguien a quien amaba se retiró para siempre de mi vida, me socorrieron dos renglones de Juan José Arreola ( "La mujer que amé se ha convertido en un fantasna, yo sólo soy el lugar de sus apariciones" ); cuando me cruzo con una de esas princesas por cuyos cuerpos vendería mi alma al demonio, repito una exlamación de Rafael Cansinos Assén ( "Dios mío, no permitas que haya tanta belleza en este mundo" );cuando la noche pesa sobre mí como el cadáver de una esperanza acribillada por la realidad, unos versos de Federico García Lorca acuden a mi mente para colorearme el insomnio como el más eficaz de los ansiolíticos (" pero la noche es interminable cuando se apoya en los enfermos y hay barcos que sólo buscan ser mirados para poder hundirse tranquilos" ).

¿ Es poco? Sin duda. Juegos para aplazar la muerte, juegos que ayudan a no perder el tiempo sino a sustituirlo, suprimirlo, abolirlo. Guiños inocuos que, aunque no me facilitan el camino, lo hacen más llevadero, lo amplían.

Si algo he aprendido es esto : la literatura sirve para que la vida nos concierna menos de lo que seríamos capaces de soportar "

Juan Bonilla.

1 comentario:

Akseh dijo...

Me ha encantado lo que escribe Juan Bonilla y lo que escribes tú.

Saludos