Paseo largo y repaso de temas jurídicos, sus mañas y recovecos que se escapan a pesar de los años. Empezar las clases y ver esas caras de alumnos que pronto quedarán nublados en el recuerdo.
Un buen poema de Martínez Sarrión.
"Con qué empeño la luz
quiere arropar, velada, la paz de la mañana
de manso mar y silenciosas calles
y de ese modo levantar el solio
que te encierra y engasta cual zafiro
cuando, al fin, sonriente y despeinada,
pasas revista a la enemiga tropa
y la encuentras conforme a tus designios
en batallones de plumón tan tibio,
en falanges de aljaba tan vacía
que proclamas, sin lucha, la victoria
y el raigón derrotado de mi ejército
cargados de grilletes tras tu carro se arrastra
traidor a su bandera, a su patria, a su dios "
Antonio Martínez Sarrión.
( Foto de autor desconocido )
1 comentario:
Que evidia..quien tuviera la oportunidad de volver a tus clases y escucharte....me conformare con leerte a la noche
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