domingo, 27 de mayo de 2012

ILUMINACIONES.


   Raro sueño, nebulosa de recuerdos. De niño en  " la chopalea", lugar rondeño ya desaparecido. Excursión con el colegio, madre Paz y madre Pura, dos monjas nos guían; de pronto el río, juncos y frescor primaveral. Hay días en que no se quiere despertar.

    " Lo que para el cuerpo físico es el orgasmo lo es para nuestro cuerpo espiritual la felicidad. Es una sensación corta y abrumadora, es aquella iluminación que buscan los místicos y los poetas. No se puede ser feliz durante años o durante días enteros. Ni tan siquiera unas horas seguidas. Dostoievski la describe como un preludio a la epilepsia. Rilke habla de la " ferocidad " de la felicidad : es la belleza llevada hasta el límite de lo soportable. más allá del cual empieza el dolor. Tal vez sea Goethe el que mejor intuyó el criterio de felicidad : se es verdaderamente feliz cuando uno quiere que se detenga el tiempo, para conservar aquel momento por toda la eternidad. En cierta manera, la propia vida adquiere sentido si, en la serie infinita de momentos banales, grises, tristes, vergonzosos, ruines, miserables, aburridos de los que se compone cualquier vida se ha encendido, sin embargo, alguna vez, aunque sea una sola, la centella emocionante de la felicidad. " Viví una vez como los dioses y ya no hay otra cosa que desee ", escribe al respecto Hölderlin. Esa es la verdadera felicidad, que la mayoría de los hombres no busca ni ambiciona, ya que los puede destruir. Vivir como los dioses, aunque sea por un momento, es una " hybris " que se paga "

              Mircea Cărtărescu.

           ( Foto de Carl Mydans )

1 comentario:

Julio dijo...

¡Me encanta! Y más la imagen. Saludos.