jueves, 7 de junio de 2012

LA BELLA CHELITO.


  ¿ Por qué se conoce tan poco a Sagarra? He pasado ratos maravillosos con sus libros y no logro entender esa falta de atención a un autor que es gozo y dinamita. Buceo en sus "Memorias", que terminó en 1918 con  24 años.

    " Madrid, al lado de la exuberancia barcelonesa en el ramo de la frivolidad, resultaba más que pobre. Allí estas cosas funcionaban de una manera rupestre; los dos únicos lugares de escándalo eran un local de la calle de la Aduana, llamado Edén Concert, piojoso como el último barracón de nuestro Paralelo, y otra covacha donde toda bestialidad era posible, y donde el público se quedaba como dentro de una jaula y como atado con cadenas para que no saltase al escenario. Aquello lo llamaban Chantecler, y estaba situado en la plaza del Carmen. La empresaria del establecimiento y el número de peso era la Bella Chelito, que con cinco chicas más, se dedicaba al género más indecente y fisiológico. Había una especie de café al lado, donde la madre de la Chelito, la señora Antonia, recibía a las amistades y leía las obras pornográficas que algún autor famoso destinaba al trabajo de su hija. Allí habíamos ido bastantes veces a presenciar más que nada las reacciones troglodíticas  del público. La Chelito mantenía allí su personalidad, pero comenzaba a desfibrarse un poco y ya no ofendía los nervios con aquel verde guisante tenso y desconcertador de cinco o seis años atrás.
    Llegué a conocer personalmente a la señora Antonia, que con sus años conservaba reminiscencias de una belleza productiva. En su rinconcito familiar e íntimo me presentó a un amigo íntimo de la casa que se llamaba José María Carretero y Novillo, más conocido por el seudónimo de " El Caballero Audaz "

               Josep Maria de Sagarra ( 1894-1961 )

               ( Foto de Horst P.Horst )

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