Fin de semana de boda en Sevilla, la iglesia de Santa Ana es maravillosa, un rato lleno de luz y recuerdos.
En casa, Roberta Flack y Zweig.
" En aquel instante me vino por fin la idea liberadora. En realidad, yo no podía ayudarle, eso lo sabía. No podía devolver la juventud a ese hombre roto, agotado. Pero tal vez pudiera proporcionarle un poco de protección contra el tormento de aquel desprecio, procurarle un poco de reconocimiento aquí, en este pueblo perdido, para los pocos meses que le quedaban de vida al marcado con la señal de la muerte... "
Stefan Zweig ( 1881-1942 )
( Foto de autor desconocido )
1 comentario:
Me encanta Zweig. Gracias
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