Mientras espero que me llame el oftalmólogo, leo poemas. Me gusta esa sala en la que no hay música y las enfermeras son exquisitas en el trato. La poesía es siempre un buen tranquilizante, sosiega, relaja.
" Hay un amor para el placer y la aventura
y un amor avergonzado, como el regreso a casa.
y luego está el amor que sobrevive
a las decepciones del tiempo
y se mantiene en la deriva de los océanos,
las constelaciones, los cuerpos y las islas.
Sin futuro, que es pasado, ni mañana, que es ayer "
José Carlos Llop.
( Foto de autor desconocido )
No hay comentarios:
Publicar un comentario