Hace años, descubrí la librería "Renacimiento" en Sevilla; oscura, larga , polvorienta con tesoros abundantes y con olor a tinta vieja; un refugio ilustrado.
Abelardo Linares, además de librero es buen poeta. La tarde trae versos que llevan nombre de mujer.
" Apenas la caricia de tu mano.
Mi piel es de cristal cuando me tocas.
¿Qué apaciguada luz, qué temblor hecho brasa
se deslíe en mis ojos si me miras ?
¿Dónde hiere tu risa y por qué hiere
si con ella me abres la mañana del mundo?
Tu existir me hace un dios y tú me creas.
No hay mayor claridad ni otro misterio "
Abelardo Linares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario