jueves, 12 de marzo de 2009

" CONTRA UN POETA QUE USABA..."


Creo que la sencillez es siempre proclama de armonía y de profundidad; en poesía me entusiasma la llama viva en poca cera. Luis Barahona de Soto, era un cordobés de Lucena que no soportaba lo barroco y buscaba sencillez. Leo un poema en el que se mete con otro poeta, un poeta que "usaba mucho de estas voces"

" Esplendores, celajes, rigoroso,
selvaje, llema, líquido, candores,
vagueza, faz, purpúrea. Cintia, ardores,
otra vez esplendores, caloroso;

ufanía, apacible, numeroso,
luengo, osadía, afán, verdor, errores,
otra y quinientas veces esplendores:
más esplendores, crespo, gloriosos;

cercos, ásperos, albos, encrespado;
esparcir, espirar, lustre, fatales,
cambiar, y de esplendor otro poquito;

luces, ebúrneo, nítido, asombrado,
orna, colora, joven, celestiales...
Esto quitado, cierto que es bonito "

Luis Barahona de Soto (1548-1595)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Admirar la belleza, sea cual sea su naturaleza, es algo sano, así pues la crítica me suena más a envidia, pero en fin...allá ellos con sus problemas de vanidad.