Leo poemas de la generación del 27 y encuentro un soneto erótico de Jorge Guillén, soneto que no conocía.
La poesía erótica de Guillén es, como ha dicho el profesor Blecua, "un alejamiento de una metafísica amorosa y un acercarse al puro acto adámico sin ninguna preocupación"; el poeta nunca cae en lo turbio o vergonzoso, ni en la aséptica frialdad. Hay veladuras en la expresión, pero son veladuras naturales que hacen sus poemas más claros
" Furtivos, silenciosos, tensos , avizorantes,
Se deslizan , escrutan y apartando la rama
Alargan sus miradas, hasta el lugar del drama :
El choque de un desnudo con los sueños de antes.
A solas y soñando ya han sido amantes
Posibles, inminentes, en visión de la dama.
Tal desnudez real ahora los inflama
Que los viejos se asoman, tímidos estudiantes.
¿Son viejos? Eso cuentan. Es cómputo oficial.
En su carne se sienten, se afirman juveniles
Porque lo son, Susana surge ante su deseo,
Que conserva un impulso cándido de caudal.
Otoños hay con cimas y ráfagas de abriles.
-Ah, Susana.- ¡Qué horror !-Perdóname. ¡Te veo!
Jorge Guillén (1893-1984)
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