Parece que el llamado " veranillo del membrillo" lleva camino de ser lacerante y largo. Me he tomado una granizada de limón y he imaginado un año sin sentidas estaciones, puro horror.
"Y así las hojas desprendidas le devoran el rostro,
su presencia ciega, el hálito borrado por un flujo
de sombra, como si la noche lo ciñese y le sellase
el labio, briznas de silencio donde la voluntad
golpea fugitiva, instruye en olvido
al espejo, copia su desnudo. Oye, cansado,
cómo prevalece el desafío de las voces,
nieve fluyendo en ojos ya sin cielo "
Jenaro Talens.
2 comentarios:
Pues a eso es a lo que vamos encaminados si no cuidamos el planeta.
Parece una tontería pero es cierto y verdadero.
Aquí donde vivo todavía no ha hecho aparición el otoño.
Qué bonito tema almirante, voy a buscarlo y llevarlo a mi blog.
Todo el contenido de tu blog es precioso.
Un abrazo
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