Acabo " Cronicas de Nueva York ". Me he llevado el libro de viaje y - cada noche- antes de Morfeo, aparecía Maeve Brennan para acompañarme.
" Alguien dijo que " cuando un chico llega a adulto ya es cinco sextas partes de memoria ". Supongo que era medio en broma, pero anoche, a las nueve y cuarto, vi a dos ciudadanos que habían alcanzado la edad adulta- dos niños crecidos de mediana edad-, paseando por la Sexta Avenida, y en cada uno de ellos la memoria estaba suspendida en favor del momento que estaban pasando juntos. Estaban enfrascados uno en el otro. Él estaba locamente enamorado. Ella parecía orgullosa : su arrogancia era excesiva, pero su desdeñosa expresión era ajena a su rostro duro. Él era distinto : aquel estado de beatitud parecía natural en él , y su expresión solo debía de cambiar según se sintiera más o menos intensamente complacido ante el mundo y su propia condición ( ...) Los dos rondaban la cuarentena (... ) Se me ocurrió que podrían darse la vuelta y descubrirme mirándoles fijamente. La expresión de él apenas cambiaría, pero la de ella sí, y yo no quería cruzarme en el camino de aquella expresión. Cuando la arrogancia abandonara su rostro, ¿qué quedaría?. Tal vez desesperación... "
Maeve Brennan ( 1917-1993 )
( Foto de Vivian Maier )
1 comentario:
Siempre somos niños, aún en la edad adulta, por tanto seguimos teniendo las cinco partes de las seis, jaja.
Leyendo poemas de Tranströmer:
"A LAS PIEDRAS
Oigo caer las piedras que arrojamos,
transparentes como cristal a través de los años. En el valle
vuela la confusión de los actos
del instante, vociferantes, de copa
en copa de los árboles, se callan
en un aire más tenue que el presente, se deslizan
como golondrinas desde una cima
a otra de las montañas, hasta
alcanzar las mesetas ulteriores,
junto a las fronteras del ser. Allí caen
todas nuestras acciones
claras como el cristal
no hacia otro fondo
que el de nosotros mismos".
Con mis mejores deseos de que comience bien el trimestre y sea productivo.
Saludos
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