Veo en un programa televisivo a un " intelectual"; después de escuchar sus cuitas, licencias, apabullantes silogismos y miradas inquisitivas, recuerdo lo que escribió mi compadre José María Herrera.
" Filólogos , cinéfilos, académicos, en general, todos los aficionados a los alardes inventariales, al exhibicionismo erudito, al escolasticismo sin escuela, creen que saber es como extender en abanico una plegada cola de brillantes plumas, una suerte de lucimiento sobre el que por lo visto no pesa la misma corrosiva sospecha que afecta a esas otras emplumadas y también graciosas criaturas que son los pavos reales, de las que se ha dicho que mostrando lo que ocultan procuran que se olvide lo que enseñan, esto es, el raquítico penacho de sus cabezas"
José María Herrera.
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