Hace demasiado tiempo que conocí a Nausícaa, y al final logré ver su rostro. Luis Alberto de Cuenca me recuerda su dulzura.
" Nausícaa, la princesa, es un prodigio de dulzura. Su belleza es la misma que adorna a la heroína del cuento popular o del romance anónimo : una belleza etérea, nebulosa, casi soñada. Admira a Ulises porque ve en el héroe la posibilidad de concretarse, de hacerse nítida entre sus fuertes brazos. Pero, ¿siente por él verdadera pasión? En una criatura tan inasible, aérea y fantástica como Nausícaa quizá el amor resultaría redundante : hasta en una epopeya mágica cosida por Homero "
Luis Alberto de Cuenca.
( Foto de Lillian Bassman )
1 comentario:
Impresionante.
Besos.
Silvia.
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