Escritor casi secreto, con largos silencios y escondites. Esta noche aparece Maurice Blanchot y me deja con sabor a otras primaveras, a pocos olvidos...
" Él la había visto una vez, dos veces, un número infinito de veces. Había pasado junto a ella y él no había borrado su presencia. Que ella no supiera nada de él, nunca lo había dudado. Ella le ignoraba, él aceptaba su ignorancia. Estaba en primer lugar aquel impulso, aquella vida profunda a causa de esta soledad redoblada; al final, aquel peso de engañifa y error. Quien ha aceptado eso una vez debe perserverar sin fin.
Ella ignora, mientras está más atenta que nadie a lo que él hace y dice.
A él le parece que ella, más que dudar de su presencia, no le da crédito.
Quizá porque ella no duda, no cree "
Maurice Blanchot (1907-2003)
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