Día festivo en Córdoba y caminata mañanera por la ribera del río. Familias en bicicletas y cielo nublado.
En casa, Torrente Ballester.
" ... El palique entre Flora y yo duró todavía un rato, hasta que ella se levantó de repente, se acercó a mí, me cogió la cabeza con las manos y me besó en la boca. " Anda, vamos ", y me agarró de la mano. Fuimos a una habitación bien puesta, donde había una cama grande, con colcha roja; quedó de espaldas a mí. " Anda, desnúdame. " Aquella noche mis manos torpes aumentaron su escasa sabiduría. " Así no. Cuidado, que me pellizcas. No, no me quites las medias. ¡ Lo que tengo que enseñarte! " Me quedé estupefacto ante su cuerpo desnudo. Pasó por mí el recuerdo de Belinha, pero rápidamente. Fue como si un viento leve soplase un fantasma en la niebla "
Gonzalo Torrente Ballester ( 1910-1999 )
( Foto de John Tona )
1 comentario:
Muy buena forma de pasarlo. Amena y un poco melancólica.
Salud
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