Como hoy tocaba cita con la alergóloga de mi hijo, me he llevado los poemas de Foxá. Mientras esperaba la entrada y con el barullo propio del lugar, alguien dijo : "Escucha lo que he visto".
" ¡ Oh , la ilusión perenne de los nevados bosques !
Tu añil Bósforo, el juego, las rosas y banquetes.
Tus " aguas dulces" de Asia y las frescas de Europa.
¡ Oh, barcas de patricios con el dosel de púrpura
hacia húmedos jardines; comidas en la hierba !
Entre eunucos, doncellas desnudas y filósofos.
Mil años fué Bizancio como madura fruta
que, jugosa de almíbar, se caía del árbol,
haciendo hervir las aguas bajo el fuego griego,
aturdida de herejes, cocheros y danzantes.
Mas fué hermosa su muerte, decadente y tranquila "
Agustín de Foxá (1903-1959)
1 comentario:
Touché, almirante.
Perdón por la extensión pero en estos momentos no puedo resistirme, ya que usted ha traído al autor.
Poema Cui-ping-sing de Agustín de Foxá
…Hoang:
Escucha…
¿En qué otro mundo de cerezas raras
oí tu voz? ¿En qué planeta lento
de bronces y de nieve, vi tus ojos
hace un millón de siglos? ¿Dónde estabas?
Fuiste agua hace mil años.
Yo era raíz de rosa, y me regabas…
Fuiste campana de Pagoda, yo era
nervio del ojo que miró a tu bronce.
Nos hemos perseguido
alma con alma, atravesando cuerpos
peregrinos de venas y latidos,
por pieles de animales, por estambres,
escamas, esqueletos cortezas;
por mil cuerpos y sangres diferentes,
alma con alma, cincelando torres
de espíritu con lágrima y sonrisa…
…Hoang:
Tú fuiste, Cui-Ping-Sing, todo lo claro,
el cisne o la ceniza.
Yo fui todo lo oscuro,
la raíz, la tortuga.
Tus pechos
son dos nidos calientes,
tejidos en la rama de un almendro…
Un saludo.
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