Un veranillo del membrillo demasiado caluroso. Copa de Oporto y poemas.
" Cuánto trabajo cuesta, cuando la dicha acaba,
Admitir que acabó y aceptar dignamente
Esa nada terrible que sigue a la hermosura.
Ha cesado el encanto y ya no somos dueños
De aquella llamarada : tanta luz, maravilla
De lo que siendo efímero semeja eternidad.
Ahora vuelven los días a ser hábito triste,
Tiempo destartalado en el que va cumpliéndose
Nuestro destino de hombres. " No puede ser
- decimos- verdad esta indigencia en que nos ha dejado,
De repente, la vida; un mal sueño nos tiene " .
Y removemos, tercos, la escoria de la luz.
Pero nada encontramos. Y respiramos muerte "
Eloy Sánchez Rosillo.
( Foto de Thorsten Overgaard )
2 comentarios:
Vaya, hoy viene E.S.R a poner un fin meláncolico al día, sin embargo en persona (lo vi en Murcia hablando de Ramón Gaya) emanaba energía y ganas de vivir.
Días hay para todo.
Saludos
No se me entristezca mi Almirante, el otoño es tiempo de renovación, sólo hay que "cogerle" el ritmo..., nada se va para siempre si vive en nosotros.
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