viernes, 15 de abril de 2016

TU CUELLO.


            Unos finos en  El mentidero. Soledad de abril, noche de recuerdos.

     " Amo tu grácil cuello bajo el pelo
        recogido, cuando un imperceptible
        movimiento ilumina
        la línea que, tan dulcemente,
        desciende hasta tu nombro;
        cuando un asomo de cansancio abate
        su dorada esbeltez de espiga y todos
        los oros del atardecer se posan
        sobre tu nuca; cuando mido
        sobre su piel desnuda esa distancia
        que va de tu inconsciencia
        a mi deseo; cuando, pensativa
        y lejana, movida
        por no sabes qué impulso,
        sonríes y te vuelves levemente
        para mirarme "

               Rafael Guillén.

               ( Foto de Jason Langer )
     


2 comentarios:

El lejano dijo...

Este verso, "su dorada de espiga y todos" es extraño. ¿No falta en él algo?

José María. dijo...


Otra vez, mis disculpas. Me comí " esbeltez " y eso que pensaba en una mujer que es todo y además esbelta. Debe ser las horas en que leo poemas y que - a veces- intento recordar versos de memoria y la memoria es un dedo tembloroso.

Gracias.

José María.